Among School Children
I
I walk through the long schoolroom questioning;
A kind old nun in a white hood replies;
The children learn to cipher and to sing,
To study reading-books and histories,
To cut and sew, be neat in everything
In the best modern way -- the children's eyes
In momentary wonder stare upon
A sixty-year-old smiling public man.
VI
Plato thought nature but a spume that plays
Upon a ghostly paradigm of things;
Soldier Aristotle played the taws
Upon the bottom of a king of kings;
World-famous golden-thighed Pythagoras
Fingered upon a fiddle-stick or strings
What a star sang and careless Muses heard:
Old clothes upon old sticks to scare a bird.
VII
Both nuns and mothers worship images,
But those the candles light are not as those
That animate a mother's reveries,
But keep a marble or a bronze repose.
And yet they too break hearts – O Presences
That passion, piety or affection knows,
And that all heavenly glory symbolise –
O self-born mockers of man's enterprise;
VIII
Labour is blossoming or dancing where
The body is not bruised to pleasure soul.
Nor beauty born out of its own despair,
Nor blear-eyed wisdom out of midnight oil.
O chestnut-tree, great-rooted blossomer,
Are you the leaf, the blossom or the bole?
O body swayed to music, O brightening glance,
How can we know the dancer from the dance?
Ante los ojos de los niños del colegio
I
Paseando en el aula inmensa pregunto;
Y una monja linda de velo blanco contesta:
Los niños aprenden a escribir y a cantar,
Aprenden a leer y la historia escuchar,
A cortar y coser, y a trabajar con esmero
Siguiendo la modernidad – los ojos de los niños
En un momento pasajero se clavan con asombro en
Un sonriente funcionario de mediana edad.
II
Sueño con el cuerpo legendario de Leda, inclinado
Sobre un fuego desazonante, un cuento que ella
Contó de un cruel reproche, o un suceso trivial
Que transformó días de inocencia infantil en tragedia-
Contó, y sentí como si nuestros dos seres se fundieran
En una esfera de joven compasión,
Para transformar la parábola de Platón en una alegoría
De yemas y claras habitando debajo del mismo techo.
VI
Su imagen actual flota hacia mi mente –
¡Me pregunto si el dedo del Quattrocento la engendró
Con las mejillas hundidas como si se hubiera bebido el viento
Y si para matar el hambre le dieron a cambio un caos de sombras!
Yo también tuve alguna vez alas adorables
Aunque nunca como las de Leda – basta de esto,
Mejor sonreír toda esta sonrisa, y mostrar
Que allí hay una especie de agradable viejo espantapájaros.
VI
Platón pensó que la naturaleza es solo espuma que juega
Sobre un paradigma espectral de objetos;
El soldado Aristóteles jugó a las canicas
Sobre los pies del Rey de Reyes;
El famoso con su muslo de oro, Pitágoras
Tocaba con un violín o unas cuerdas
Lo que cantaban las estrellas y las indiferentes Musas escuchaban:
Ropa vieja encima de ramas viejas para espantar un pájaro.
VII
Monjas y madres, ambas adoran imágenes,
Pero aquellos que prenden las velas no son como aquellos
Que reviven los ensueños de las madres,
Pero mantienen de pie a una estatua de mármol o de bronce.
Sin embargo, también rompen corazones – ¡Oh Olam!
Que la pasión, piedad y la afección le conocen,
Y que toda la gloria del paraíso simboliza –
¡Oh burladores auto-engendradores del ser del hombre!
VIII
El esfuerzo está floreciendo y bailando en el lugar
Donde el cuerpo no se lastima para satisfacer al alma.
Ni la belleza nace de su propia desesperanza,
Ni la sabiduría soñolienta nace del combustible de la medianoche.
¡Oh castaños!, con flores de profunda raíz,
¿Eres la hoja, la flor o el tronco?
¡Oh cuerpo sometido a la música! ¡Oh centelleante mirada!
¿Cómo del baile se distingue el bailarín?
Among School Children
I
I walk through the long schoolroom questioning;
A kind old nun in a white hood replies;
The children learn to cipher and to sing,
To study reading-books and histories,
To cut and sew, be neat in everything
In the best modern way -- the children's eyes
In momentary wonder stare upon
A sixty-year-old smiling public man.
VI
Plato thought nature but a spume that plays
Upon a ghostly paradigm of things;
Soldier Aristotle played the taws
Upon the bottom of a king of kings;
World-famous golden-thighed Pythagoras
Fingered upon a fiddle-stick or strings
What a star sang and careless Muses heard:
Old clothes upon old sticks to scare a bird.
VII
Both nuns and mothers worship images,
But those the candles light are not as those
That animate a mother's reveries,
But keep a marble or a bronze repose.
And yet they too break hearts – O Presences
That passion, piety or affection knows,
And that all heavenly glory symbolise –
O self-born mockers of man's enterprise;
VIII
Labour is blossoming or dancing where
The body is not bruised to pleasure soul.
Nor beauty born out of its own despair,
Nor blear-eyed wisdom out of midnight oil.
O chestnut-tree, great-rooted blossomer,
Are you the leaf, the blossom or the bole?
O body swayed to music, O brightening glance,
How can we know the dancer from the dance?
Ante los ojos de los niños del colegio
I
Paseando en el aula inmensa pregunto;
Y una monja linda de velo blanco contesta:
Los niños aprenden a escribir y a cantar,
Aprenden a leer y la historia escuchar,
A cortar y coser, y a trabajar con esmero
Siguiendo la modernidad – los ojos de los niños
En un momento pasajero se clavan con asombro en
Un sonriente funcionario de mediana edad.
II
Sueño con el cuerpo legendario de Leda, inclinado
Sobre un fuego desazonante, un cuento que ella
Contó de un cruel reproche, o un suceso trivial
Que transformó días de inocencia infantil en tragedia-
Contó, y sentí como si nuestros dos seres se fundieran
En una esfera de joven compasión,
Para transformar la parábola de Platón en una alegoría
De yemas y claras habitando debajo del mismo techo.
VI
Su imagen actual flota hacia mi mente –
¡Me pregunto si el dedo del Quattrocento la engendró
Con las mejillas hundidas como si se hubiera bebido el viento
Y si para matar el hambre le dieron a cambio un caos de sombras!
Yo también tuve alguna vez alas adorables
Aunque nunca como las de Leda – basta de esto,
Mejor sonreír toda esta sonrisa, y mostrar
Que allí hay una especie de agradable viejo espantapájaros.
VI
Platón pensó que la naturaleza es solo espuma que juega
Sobre un paradigma espectral de objetos;
El soldado Aristóteles jugó a las canicas
Sobre los pies del Rey de Reyes;
El famoso con su muslo de oro, Pitágoras
Tocaba con un violín o unas cuerdas
Lo que cantaban las estrellas y las indiferentes Musas escuchaban:
Ropa vieja encima de ramas viejas para espantar un pájaro.
VII
Monjas y madres, ambas adoran imágenes,
Pero aquellos que prenden las velas no son como aquellos
Que reviven los ensueños de las madres,
Pero mantienen de pie a una estatua de mármol o de bronce.
Sin embargo, también rompen corazones – ¡Oh Olam!
Que la pasión, piedad y la afección le conocen,
Y que toda la gloria del paraíso simboliza –
¡Oh burladores auto-engendradores del ser del hombre!
VIII
El esfuerzo está floreciendo y bailando en el lugar
Donde el cuerpo no se lastima para satisfacer al alma.
Ni la belleza nace de su propia desesperanza,
Ni la sabiduría soñolienta nace del combustible de la medianoche.
¡Oh castaños!, con flores de profunda raíz,
¿Eres la hoja, la flor o el tronco?
¡Oh cuerpo sometido a la música! ¡Oh centelleante mirada!
¿Cómo del baile se distingue el bailarín?